Los pasos necesarios que debes dar cada día si quieres estar sano y perder peso

Con motivo de la desescalada, millones de españoles se han lanzado a pasear por las calles de las ciudades. Hoy repasamos una serie de estudios sobre los beneficios de andar

Desde que todo el país entró en la desescalada y se permitieran los paseos individuales, millones de españoles se han lanzado a las calles a hacer deporte y reconectar con el exterior después de dos meses confinados. Las calles de las principales ciudades españolas se han vuelto a llenar. Algunos han optado por emprender la operación bikini, este año especialmente diferente al haber pasado tanto tiempo en casa, y por ello han apretado bien la intensidad de estas salidas poniéndose las zapatillas, dispuestos a correr.

Otros, debido a su edad o a sus condiciones físicas, se han tenido que confirmar con andar deprisa y durante tiempos más prolongados para avanzar hacia esa pretendida meta de adelgazamiento. Hagas lo que hagas, ya sea corriendo, caminando o andando en bicicleta, esta clase de ejercicios de cardio tienen un gran impacto en tu salud en general, y no solo en la báscula. Si adaptas esta serie de marchas a tu rutina conseguirás importantes beneficios en tu sistema cardiovascular, además de gozar de más capacidad de resistencia y mejorar la respiración.

Aquellas personas que anduvieron alrededor de 4.400 pasos diarios tenían tasas de mortalidad más bajas que las que se conformaron con la mitad

Por no hablar de los resultados que no se perciben a nivel físico. Hacer deporte es la mejor manera de sentirse bien, ya que al realizar esfuerzo liberas endorfinas, la conocida como hormona de la felicidad, por lo que te sentirás mucho más relajado justo después y podrás afrontar tu vida diaria de una manera más serena, reduciendo el riesgo de padecer episodios de estrés o ansiedad.

Lo que seguramente muchos se estén preguntando estos días es cuál es el número exacto de pasos que debes dar para empezar a notar cambios y mejoras en tu condición física. En realidad, lo lógico sería pensar que cuantos más, mejor. Pero si ya no tienes las aptitudes físicas de las que gozabas hace años, es posible que quieras conformarte con una opción intermedia que te mantenga fuerte, resistente y vigoroso, pero que tampoco sea demasiado exigente.

Existen infinidad de estudios sobre la frontera a partir de la cual la caminata se vuelve efectiva y no un mero paseo aleatorio que no entraña apenas beneficios para tu salud. La epidemióloga I-Min Lee de la Universidad de Harvard elaboró un estudio en el que monitoreó a 17.000 mujeres durante varios años cuya edad media era de 72 años para conocer de cerca cuál es la cantidad mínima de pasos diarios que debían dar para notar cambios. Así, llegó a la conclusión de que aquellas que daban alrededor de 4.400 diarios tenían tasas de mortalidad más bajas que las que se conformaron con la mitad.

Para ella, la marca de los 10.000 pasos es contraproducente. Según la edad, el género y el estilo de vida de la persona en cuestión, llegar a los 5.000 puede tener un impacto positivo en la esperanza de vida. Otro estudio publicado en marzo de este año reveló que caminar más cerca de los 8.000 pasos al día para las personas de mediana edad, un 36% de las cuales padecían obesidad, tenía importantes beneficios de cara a aumentar la calidad de vida.

Un estudio halló que las personas que caminan de forma frecuente al menos 100 pasos por minuto pueden esperar a vivir entre 15 y 20 años más

Los pasos, al fin y al cabo, es una medida que se usa mucho para calcular el nivel de alcance físico del cuerpo cuando camina. Se hizo muy popular tras el auge de los relojes inteligentes de muñeca que arrojan esta serie de datos, acompañados del número aproximado de calorías quemadas al final del ejercicio. Por ello, también podríamos utilizar cualquier otro parámetro para establecer el punto más adecuado si quieres notar cambios positivos sin tampoco acabar extenuado.

En ese caso, las recomendaciones generales de los Centros para el Control de Enfermedades estadounidenses ponen el foco en el tiempo: en concreto, 30 minutos serían los necesarios para percibir beneficios a corto, medio y largo plazo en la salud en general. Otro detalle a tener en cuenta es la velocidad a la que recorras una distancia o un período de tiempo determinado.

Un estudio publicado en ‘Mayo Clinic Proceedings’ en junio de 2019 descubrió que las personas que caminan de forma frecuente al menos 100 pasos por minuto pueden esperar a vivir entre 15 y 20 años más. La razón es que andar deprisa supone ser el punto medio entre un paseo ligero en el que apenas hay un gasto calórico y un ejercicio de cardio como viene a ser una carrera de fondo. Esta modalidad de ejercicio fortalece el corazón y es probable que disminuya el riesgo de sufrir alguna enfermedad cardiovascular en el futuro.

Por todo ello, y en especial si estás pensando realizar un cambio en tu estilo de vida, lo mejor es que aproveches estos días de primavera en los que por fin se puede salir en caminar a tu ritmo. Más allá de los estudios académicos radica la voluntad personal. Y si tu situación es excepcional y necesitas urgentemente perder peso, lo mejor será que acompañes el ejercicio con una dieta equilibrada y a la vez te pongas en contacto con algún médico especialista. ACyV. El Confidencial 27/05/2020