España es saludable

¿Debemos sentirnos complacidos con la noticia de que España es el país más saludable del mundo?

Sin duda tenemos todos los medios básicos para ser uno de los países del mundo con mejor calidad de vida. Es verdad que tenemos unos alimentos espléndidos; que disfrutamos de una gastronomía fantástica; que gozamos de un clima magnífico; que nuestra cultura es notable; que nuestra sanidad es envidiada y que tenemos una larga lista de factores favorables más. Pero también hemos visto la degradación de la Atención Primaria con la crisis económica, el descenso de nivel de vida de los jóvenes de toda una década y su aceptación progresiva de formas de alimentarse malsanas y de una falta alarmante de actividad física que están trayendo a nuestra sociedad unos niveles de obesidad y sobrepeso preocupantes de los que nada bueno puede esperarse.

Entonces… será que ¿en el mundo de los ciegos el tuerto es el rey? o que ¿la noticia es vieja y será el reconocimiento a méritos pasados? Quizás ahora sea el momento de recordar que la salud es un camino siempre inacabado en el que sobran las complacencias y falta el esfuerzo planificado continuo.