La pizza

 LA PIZZA 

  La pizza es uno de los platos que más se han puesto de moda en los últimos tiempos. Tiene varias ventajas: fácil y rápida de preparar, acepta multitud de ingredientes y puede comerse en un restaurante con mesa y mantel o sentado en un banco del parque; pero tiene un grave problema: si no la cocinas tú y no controlas los ingredientes que se añaden a la base, con frecuencia resulta indigesta, provoca mucha sed y puede generar aumento de peso corporal por el elevado número de calorías de alguno de sus ingredientes.

  Analicemos el plato. La pizza es una base de harina panificada a la que se le añade dos ingredientes básicos: primero salsa de tomate y queso y finalmente varios alimentos y especies tales como carne, pescado, vegetales, embutidos, orégano, etc. para finalmente ser todo ello horneado para su cocinado final.

  Puedes comprar una base de pizza ya elaborada, congelada o fresca o bien puedes decidir elaborarla tú mismo. Como hemos dicho que la base es una harina panificada contendrá una cantidad de calorías similar al pan tostado, es decir unas 380 kilocalorías/100 gramos. Ahora hay que cuantificar los ingredientes; la salsa de tomate contiene pocas calorías: unas 70 kcal./100g., pero con los quesos no es lo mismo (la mozzarella contiene 280 kcal/100 gramos, el parmesano 440 y el manchego tierno 320); con los otros ingredientes sucede igual: si añadimos salchicha son 235 kcal/100 gramos, o beicon son 470, pero si añadimos jamón cocido son 175, o atún en aceite 330; por el contrario si añadimos champiñón, cebolla o pimiento verde son solamente de 20 a 30 kcal/100 gramos y si nos gustan las aceitunas 180.

  La consecuencia es que la pizza es saludable o malsana en virtud de los ingredientes que le añadamos; si la cargamos de “triple queso”, salchicha y beicon obtendremos un plato con más de 400 kcal/100 y grasas saturadas en cantidad, mientras que si nuestra pizza contiene un queso ligero y son vegetales sus ingredientes mayoritarios solamente tendrá 200 kcal/100g. Conviene precisar que es muy fácil consumirse 2 raciones de pizza en una comida, es decir 300 gramos de pizza que pueden contener 1.200 kilocalorías de las 2.000 a 2.500 kilocalorías que un joven necesita de media al día.

  Ahora que ya conocemos como tiene que ser nuestra pizza vamos a aprender a cocinarla de modo que no perjudique ni nuestra salud ni nuestra economía y sea divertida y fácil de cocinar. Este será el tema del próximo capítulo que encontrarás en el ÁREA JOVEN PONTESANO de esta web.