Los medicamentos para adelgazar que se probarán en 2025: ¿vencerán a Ozempic?

Los medicamentos para adelgazar que se probarán en 2025: ¿vencerán a Ozempic?

Las compañías farmacéuticas están probando una serie de medicamentos que esperan que ofrezcan beneficios más allá de la pérdida de peso.

Por Giorgia Guglielmi, publicado en Nature el 06-02-2045

A medida que crece el apetito por los medicamentos para bajar de peso de gran éxito en todo el mundo, los científicos están desarrollando la próxima cosecha de medicamentos que, esperan, mejoren el rendimiento de estos medicamentos y ofrezcan beneficios más allá de la pérdida de peso.

«Va a ser otro año en el que, cada semana, va a haber algo realmente genial», dice Daniel Drucker, endocrinólogo de la Universidad de Toronto en Canadá.

Los fabricantes de medicamentos se están basando en el éxito de medicamentos como Ozempic y Wegovy, que contienen el ingrediente activo semaglutida, un agonista del receptor del péptido-1 similar al glucagón (GLP-1). Estos medicamentos imitan a la hormona GLP-1, ayudando a regular los niveles de azúcar en la sangre y el apetito.

Pero la mayoría de estos medicamentos son costosos, requieren inyecciones semanales y deben tomarse a largo plazo para evitar la recuperación de peso. Estos son algunos de los problemas que las compañías esperan que los medicamentos alternativos aborden.

Nature analiza los medicamentos para adelgazar que se probarán en 2025 y lo que tienen para ofrecer.

Tirzepatida: reduce el peso del corazón y la grasa circundante

La tirzepatida, que se vende como Mounjaro y Zepbound y se administra por inyección, imita al GLP-1 y a otra hormona llamada polipéptido inhibidor gástrico (GIP), que está involucrada en el metabolismo de las grasas. En los resultados del ensayo publicados en noviembre, ayudó a los participantes a perder hasta un 20% de su peso corporal durante 72 semanas y redujo el riesgo de diabetes, en comparación con un placebo. Las personas que toman semaglutida durante 68 semanas pierden hasta el 15% de su peso corporal. Los participantes que tomaron tirzepatida también tuvieron una reducción beneficiosa en el peso del corazón y en la grasa que rodea el corazón, mejoraron la movilidad y redujeron la presión arterial y la inflamación en comparación con las personas que tomaron un placebo.

Un ensayo que se espera que concluya en 2025 está examinando los efectos de la tirzepatida sobre la enfermedad cardíaca en personas con obesidad y diabetes.

Retatrutide: los participantes del ensayo informan de una pérdida de peso importante

La retatrutida, que aún no ha recibido la aprobación regulatoria para la pérdida de peso, activa los receptores de GLP-1, GIP y glucagón, una hormona que regula los niveles de azúcar en la sangre. Desarrollado por Eli Lilly en Indianápolis, Indiana, ha mostrado resultados aún más prometedores que la tirzepatida y la semaglutida, y los participantes del ensayo perdieron un promedio del 24% de su peso corporal durante 11 meses. El medicamento también ayudó a reducir los niveles de azúcar en la sangre en personas con diabetes, y ahora se está probando en ensayos de fase III que se espera que concluyan para 2026.

Los investigadores están entusiasmados con las terapias combinadas como la retatrutida, dice Beverly Tchang, endocrinóloga de Weill Cornell Medicine en la ciudad de Nueva York, quien señala que la complejidad de la obesidad hace que el enfoque más prometedor sea dirigirse a múltiples vías.

Orforglipron: el fármaco oral es prometedor

Orforglipron, un candidato a fármaco oral de moléculas pequeñas también desarrollado por Eli Lilly, mostró resultados similares a las inyecciones de GLP-1 en roedores, y condujo a una pérdida de peso de aproximadamente el 10% durante 26 semanas en personas con obesidad, mejorando la presión arterial y los niveles de moléculas grasas circulantes. Al igual que Ozempic, el orforglipron es un agonista del receptor GLP-1, pero mientras que el Ozempic requiere inyección, el orforglipron se presenta como una píldora diaria.

Lilly espera completar los ensayos de fase III en 2025, y orforglipron podría recibir la aprobación regulatoria de EE. UU. en 2026, según el director ejecutivo de Lilly, Dave Ricks.

«El comodín son las moléculas pequeñas orales», dice Randy Seeley, especialista en obesidad de la Facultad de Medicina de la Universidad de Michigan en Ann Arbor. Muchas compañías están trabajando en este enfoque, porque las píldoras podrían ser más atractivas y rentables que las inyecciones, pero el progreso ha sido más lento de lo esperado debido a los desafíos de dosificación, dice. «Si uno de ellos finalmente se abre paso, tiene la capacidad de alterar el paisaje de manera bastante considerable».

MariTide: mantenimiento de la pérdida de peso

La compañía biofarmacéutica Amgen en Thousand Oaks, California, está planeando un ensayo de fase III de su candidato a fármaco MariTide, que activa los receptores de GLP-1 mientras reduce la actividad de GIP. El medicamento se puede tomar mensualmente por inyección y resultó en una pérdida de peso promedio de hasta un 20% durante 52 semanas, según los datos publicados por la compañía.

A diferencia de otros tratamientos, MariTide ha demostrado la capacidad de mantener la pérdida de peso durante varios meses después de la última dosis. Cuando las personas dejan de tomar semaglutida o tirzepatida, tienden a recuperar peso rápidamente, pero eso no parece suceder con MariTide, lo que podría alentar a más personas a recibir el tratamiento, dice Seeley, quien asesora y recibe fondos de Amgen y otras compañías que desarrollan medicamentos para la obesidad.

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