.Obesidad y sobrepeso
Melatonina: ¿futura e innovadora terapia para combatir la «diabesidad»?
Melatonina: ¿futura e innovadora terapia para combatir la ‘diabesidad’?
Nuevos datos sugieren que protege contra el daño muscular y restablece la proporción de fibras alteradas por la obesidad y la diabetes.
Raquel Serrano Diario Médico Actualizado Dom, 02/03/2025 – 14:00
Un estudio internacional dirigido por especialistas de la Universidad de Granada (UGR) ha revelado que la melatonina, conocida por su capacidad para regular el ciclo sueño/vigilia, puede restablecer la composición de las fibras musculares y proteger al músculo esquelético del daño causado por la obesidad y su diabetes tipo 2 derivada, más conocida como ‘diabesidad’.
La obesidad y la diabetes tipo 2 son dos de las enfermedades metabólicas más prevalentes en el mundo, afectando a casi 900 millones y 800 millones de personas, respectivamente. Ambas condiciones están estrechamente relacionadas y suelen coexistir en lo que se conoce como ‘diabesidad’. Este trastorno no sólo reduce la calidad de vida de los pacientes, sino que también representa un desafío para los sistemas de salud.
Los resultados, publicados en Free Radical Biology and Medicine y en Antioxidants, muestran que esta hormona mejora la función mitocondrial, reduce el estrés celular y previene la muerte programada de las células, ofreciendo una nueva estrategia terapéutica para combatir esta enfermedad metabólica.
El estudio, dirigido por el catedrático de Farmacología de la UGR Ahmad Agil, ha demostrado que la administración de melatonina en roedores obesos y diabéticos durante 12 semanas consiguió favorecer la conversión de fibras musculares glicolíticas (rápidas) a fibras oxidativas (lentas), mejorando la eficiencia energética del músculo. Este cambio no sólo optimiza la producción de energía, sino que también protege al músculo del deterioro causado por la ‘diabesidad’, una condición que combina obesidad y diabetes tipo 2, concreta la investigación.
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Esta investigación se ha centrado en el músculo esquelético, un órgano clave que representa más del 50% del peso corporal. Las fibras musculares se dividen en tres tipos: las de contracción lenta (tipo I) o fibras rojas debido al gran número de mitocondrias que poseen, las de contracción rápida (tipo IIb) o fibras blancas y las intermedias (tipo IIa).
Además, cada músculo de nuestro organismo tiene una proporción determinada variable y cambiante de cada uno de estos tipos de fibras, dependiendo del tipo de movimiento realizado. Durante actividades musculares intensas de corta duración predominan las fibras blancas con metabolismo glicolítico, y durante actividades musculares de baja intensidad prolongada predominan fibras rojas con metabolismo oxidativo.
Según los resultados, la melatonina logró restablecer la proporción saludable de estas fibras, aumentando las oxidativas y reduciendo las glicolíticas, revirtiendo los efectos de la ‘diabesidad’, lo que mejora la capacidad del músculo para quemar grasas -reduciendo la acumulación de grasa, y por tanto, la obesidad-, y producir energía.
Además, la melatonina mostró efectos similares a los de una actividad aeróbica prolongada, sobre todo mejorando la función mitocondrial y regulando los niveles de calcio en los compartimentos celulares, lo que reduce el estrés celular y previene la muerte programada de las mismas. Según Agil, se ha descubierto que «la melatonina restablece los niveles de calcio en las mitocondrias y el retículo endoplasmático, lo que contribuye a reducir el daño celular».
Estos resultados se encuentran en la línea de los previamente publicados durante los últimos 15 años por este grupo de investigación. Sus hallazgos podrían abrir nuevas perspectivas para el desarrollo de estrategias terapéuticas basadas en la administración farmacológica de melatonina, dirigidas a mejorar la salud muscular en pacientes con diabesidad. El principal reto es la aplicación de la melatonina en el campo de la medicina, señalan los autores del trabajo.
Confirmar los resultados en humanos
Los investigadores de la UGR consideran que estos hallazgos abren nuevas perspectivas para el uso terapéutico de la melatonina, una sustancia con un perfil de seguridad bien establecido. Para Agil, los resultados refuerzan la idea de que la melatonina podría tener aplicaciones terapéuticas en enfermedades metabólicas, mejorando la salud muscular de los pacientes», señala recordando que «mantener un estilo de vida saludable, activo y equilibrado durante el día acompañado de un correcto descanso nocturno es clave para preservar la salud muscular y prevenir los efectos negativos de la obesidad»
Sin embargo, el equipo también subraya la necesidad de realizar estudios clínicos en humanos para confirmar estos resultados y determinar la dosis óptima en cada caso. «Si logramos demostrar su eficacia en humanos, podríamos estar ante un tratamiento innovador que mejoraría la vida de millones de personas», concluye el director de la investigación.
El trabajo, además de científicos del Departamento de Farmacología de la Universidad de Granada, han participado especialistas del Instituto de Neurociencias Federico Olóriz y el Instituto Biosanitario de Granada, así como de otras instituciones colaboradoras como el Departamento de Nutrición y Bromatología y el Departamento de Histología de la UGR, el Centro de Endocrinología, Diabetes y Nutrición de Madrid, la Universidad de Qatar y la Universidad Yarmuk de Jordania.
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