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Que tus hijos adoren las verduras
Diego Guerrero te ayuda a que tus hijos adoren la Verdura
Que a la mayoría de los niños no les guste la verdura no es ninguna novedad. Ya sea por manías, por imitación del comportamiento de otros niños o por razones realmente objetivas, (como que les desagrade su sabor, apariencia o textura) esa aberración hacia las verduras puede convertirse en una auténtica pesadilla para los padres cuando implica que los niños destierren de su dieta un grupo de alimentos que cumplen con una función tan importante dentro de la pirámide alimenticia. Pero lo último que hay que hacer es tirar la toalla. Reale Seguros nos ofrece las claves para enfrentarnos a este reto de una manera sencilla y conseguir que los más pequeños incorporen las verduras a su dieta de forma natural. Para esta misión cuenta con la ayuda de Diego Guerrero, el prestigioso chef de Dstage, que ya tiene en su historial cuatro estrellas Michelin, y con un poderoso instrumento con el que Reale Seguros se siente más que familiarizado: la confianza.
Si conseguimos que a los niños les divierta preparar un plato de verduras, que se sientan familiarizados con este tipo de alimentos y jueguen a combinarlos entre sí, ya habremos dado un gran paso.
“Dejad que los niños se acerquen a la cocina, dejadles que toquen, que manipulen y que enreden. Hay que dejarles ser creativos. Pero sobretodo, hay que dejarles que cocinen para que vayan cogiendo confianza con los alimentos y prueben cosas nuevas”. Diego Guerrero, chef de Dstage. Y esto es precisamente lo que consigue Guerrero en una de las Historias de Confianza de Reale Seguros: a través de juegos, recetas divertidas y el descubrimiento de nuevos sabores, los niños se sienten cómodos en una situación nueva y aumentan su confianza para enfrentarse a nuevos desafíos.
Claves para que a los niños les guste la verdura:
· 1. Conviérteles en tus pinches. No les dejes fuera de la cocina. Porque cuando tocan las verduras, las huelen, las lavan, las trocean y ayudan a los mayores a cocinarlas, es más fácil que empiecen a interesarse en ellas. Como el chef Diego Guerrero propone, puedes preparar los platos de verduras con los más pequeños de la casa, haciendo de esta actividad un plan familiar muy entretenido.
· 2. Llévatelos a la compra. Sí, es cierto que con los más pequeños este plan puede resultar una auténtica aventura de riesgo. Pero no deja de ser una buena forma de despertar su interés por la comida saludable, porque en el mercado es donde se encuentra una amplia variedad de verduras, y se encuentran expuestas de una forma atractiva, con sus distintas formas y colores. Si involucramos a los niños en la elección de las verduras, lo tendremos más fácil a la hora de conseguir que las cocinen y, por qué no, que terminen por integrarlas en su dieta.
· 3. Lo bonito primero. Empieza por las verduras de sabor más dulce y de aspecto más atractivo: como la calabaza, la zanahoria, el maíz o los tomatitos cherry.
· 4. Comienza por pequeñas cantidades. Puede ser como acompañamiento de algo que sí les guste (por ejemplo, hamburguesa con ensalada), para que les cueste menos esfuerzo terminarse el plato.
· 5. Mejor no impongas hábitos. Los niños terminan aborreciendo los alimentos si se les fuerza a comérselos. No lo olvides, la clave está, como aseguran desde Reale Seguros, en la confianza: inspirar, empujar y guiar a las personas. Por eso, en este caso, educar es siempre mejor que forzar. Y, para esto, podemos servirnos de alimentos que ya les gusten y mezclarlos con los que en principio rechazan. Por ejemplo, puede que odien las espinacas, pero si les ofrecemos croquetas de espinacas o lasaña de espinacas, puede que consigamos que las coman. A medida que vayan creciendo, podemos ir “desenmascarando” esos ingredientes poco a poco hasta que los acepten sin problema.
· 6. Elabora recetas originales. Como aconseja el chef Diego Guerrero. No hace falta que seas un gran chef, basta echarle un poco de imaginación y en transmitir energía y creatividad en la cocina. ¿Has probado a hacer una casita con el puré de patata y zanahoria? ¿o una cara sonriente mezclando los distintos colores y formas de cada ingrediente? ¿o unos espaguetis de calabacín con mucho parmesano por encima?
· 7. No les premies siempre que coman verduras. La promesa de que tendrán un postre rico si se terminan el plato no debería convertirse en algo habitual si no quieres que terminen convirtiendo esto en una exigencia por su parte.
· 8. Come lo mismo que ellos. Dar ejemplo es fundamental a la hora de educar. Si en casa los mayores son los primeros que no comen verduras, ¿cómo pretenden que los más pequeños sí lo hagan?
· 9. Dales a probar, cuanto antes mejor. Si introducimos las verduras cuando son más pequeños, más fácil será que las acepten. El Mundo 27 enero 2018
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