.Compra
Actualización de criterios que definen los productos saludables
La FDA actualiza sus criterios para definir qué son los productos saludables
La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos establece nuevos límites de azúcar, sodio y grasas saturadas para calificar un producto como “saludable” y ayudar a la población a mejorar su alimentación
Por Consumer 17 de enero de 2025
Menos grasas saturadas, menos azúcares añadidos y menos sal. La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) ha actualizado los requisitos para calificar cuándo un producto alimenticio se puede considerar “saludable”. La iniciativa, impulsada por el Departamento de Salud y Servicios Humanos, se origina en 2022 y está alineada con los criterios de las ‘Guías Alimentarias para los Estadounidenses’ más recientes.
Nuevos conocimientos en nutrición
La nutrición es una ciencia joven que, en los últimos años, ha acumulado nuevos datos y evidencias. Los estudios, cada vez más abundantes y precisos, arrojan luz sobre aspectos fundamentales que antes no se conocían o que se concebían de un modo distinto. Un ejemplo clásico de estos cambios de criterio es el caso del huevo, un alimento que durante décadas se consideró insano por su contenido en colesterol y que, sin embargo, ha demostrado ser una opción saludable, rica en minerales y proteínas.
Esta dinámica de hallazgos y nuevas evidencias es la que impulsa los ajustes en las recomendaciones nutricionales para la población general. No es que “los nutricionistas no se ponen de acuerdo” o que “ya no se puede comer nada”, como se suele decir, sino que los datos invitan a revisar las directrices que se han dado hasta la fecha. El conocimiento avanza y las guías se actualizan.
En España, la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) publicó en 2022 unas guías de alimentación saludable y sostenible, que se basan en el conocimiento demostrado más reciente. Y eso mismo es lo que ha ocurrido en Estados Unidos con las guías de la FDA (Food and Drugs Administration, Administración de Alimentos y Medicamentos), que llevaban sin tocarse desde la década de los noventa y que recientemente se han renovado.
Criterios para ser “saludable”
A partir de ahora, en Estados Unidos, los productos que quieran incluir la etiqueta de “saludable” deberán cumplir unos requisitos nutricionales concretos.
- Por un lado, deben contener cantidades significativas de al menos uno de los grupos alimenticios recogidos en las Guías Alimentarias para Estadounidenses: lácteos, granos, frutas, verduras o alimentos ricos en proteínas, como legumbres, carnes magras, nueces, mariscos y productos de soja.
- Por otro, deberán mantenerse por debajo de ciertos límites de azúcares añadidos, sodio y grasas saturadas, que son los nutrientes asociados con enfermedades metabólicas y cardiovasculares, como hipertensión, obesidad o diabetes tipo 2, entre otras.
Principales cambios
De todos los cambios, uno de los más importantes es la discriminación de los distintos tipos de grasas. Mientras que, en la década de los 90, la directriz principal era restringir el consumo de grasas —en general—, hoy se sabe que no todas son iguales y que, incluso, hay grasas que son beneficiosas para el organismo. Así, en las nuevas guías, la FDA reconoce las bondades de las grasas contenidas en alimentos como pescados azules, frutos secos, semillas y, también, en el aceite de oliva. El objetivo ahora es limitar las grasas saturadas.
Otro de los cambios significativos está en los azúcares; en concreto, en los azúcares añadidos, que se incluyen en las guías como un nutriente cuya ingesta hay que vigilar y reducir (e incluso evitar cuando hablamos de niños pequeños).
➡️ Nuevos valores y límites
Las recomendaciones recogidas en las nuevas guías dietéticas estadounidenses que sirven de referencia para la actualización de la FDA son las siguientes:
- Azúcares añadidos. Evitar alimentos y bebidas con azúcares añadidos en los niños menores de dos años. A partir de esa edad, los azúcares añadidos deben suponer menos del 10 % de las calorías diarias.
- Grasas saturadas. A partir de los dos años de edad, deben suponer menos del 10 % de las calorías diarias.
- Sodio. Menos de 2,3 mg de sodio por día (unos 5,75 g de sal), o incluso menos en los menores de 14 años.
➡️ Etiquetado en los envases
“Dado que los consumidores muestran interés en identificar más rápidamente los alimentos saludables, la agencia también está en el proceso de estudiar y explorar el desarrollo de un símbolo que los fabricantes podrían usar para mostrar que su producto cumple con los criterios de afirmación ‘saludable’. En conjunto, la afirmación ‘saludable’ actualizada y ese símbolo actuarían como señales rápidas para ayudar a los consumidores a identificar opciones de alimentos más saludables con mayor facilidad”, señalan desde la FDA.
Con todo, de momento la implementación es voluntaria. Las empresas no están obligadas a utilizar la etiqueta ni a hacer cambios de calado en el etiquetado frontal. De ahí que los expertos en salud pública de Estados Unidos insistan en la importancia de avanzar con iniciativas de etiquetado frontal, que harían más visibles las características nutricionales más importantes de los alimentos. Contar con un etiquetado frontal estandarizado (como Nutri-Score en Europa o los octógonos en América Latina) facilitaría a los consumidores identificar con rapidez opciones más saludables en el supermercado.
Leave a reply